El contraste La composición
El contraste de una imagen desempeña un papel fundamental en el aspecto artístico. Se modifica técnicamente por el modo de medición de la luz y la utilización de la corrección de exposición.
El contraste de una imagen varía según las diferentes fuentes de luz y la presencia de elementos claros y oscuros en la escena fotografiada.
En verano, la luz a mediodía es muy dura y crea un contraste significativo entre las zonas de sombra y las zonas de luz. Generalmente fotografiamos de espaldas al sol para lograr una iluminación uniforme. Situándose frente al sol (a contraluz) podrá obtener efectos extraordinarios. Por ejemplo, el contraluz permite realizar retratos con sombras chinas: el sujeto se separa de la escena luminosa y se obtiene un resultado increíble entre sombra y luz que subraya el contorno del sujeto. Utilice un elemento como un arco en la sombra situado en los bordes de la imagen: esto aumentará la profundidad y el contraste.
En invierno, fotografiar la nieve es sinónimo de fotografiar el blanco rodeado de sujetos con un fuerte contraste. En modo AUTO (automático), la DxO ONE efectúa una exposición media sobre el conjunto de la escena. Como hay muchos valores claros, la imagen tiende a estar subexpuesta: la nieve será gris y sin contraste. Para obtener un mejor resultado, utilice la compensación de exposición disponible en todos los modos de captura. Si no consigue el resultado deseado, escoja el modo M (manual) y pruebe distintos ajustes hasta encontrar el que más le guste. Se trata de buscar el equilibrio entre las partes claras y las oscuras de la escena, sabiendo que si la nieve es demasiado clara, no habrá relieve.
Al final de una jornada de esquí, el contraste será menos fuerte y la exposición más sencilla de ajustar.
Técnicamente, el contraste se modifica principalmente con los tres modos de medición de la DxO ONE.
La medición matricial efectúa una media de las luces y atenúa el contraste: esta opción es adecuada cuando el sol es fuerte y desea conservar los detalles de las zonas claras y de las oscuras.
La medición ponderada al centro efectúa una medición en el centro de la imagen y funciona en la mayoría de los casos si la escena tiene poco contraste.
La medición puntual solo afecta a una zona muy reducida de su elección (punto de focalización). Si hay una fuente muy luminosa, como una lámpara sobre fondo negro, estará correctamente expuesta, pero el resto de la imagen estará completamente subexpuesta y con mucho contraste. Obtendrá un estilo de imagen denominado “Low Key” o claroscuro. Por el contrario, si se trata de un sujeto oscuro, el fondo se vuelve muy claro, e incluso sobreexpuesto. En ese caso, obtenemos una imagen con un efecto “High-Key“.
En días grises o nublados no hay sombras. La imagen es relajante y suave, pero no tiene relieve y el contraste es reducido. Puede aumentar el contraste modificando la exposición aportada por la célula. Para ello, utilice la compensación de exposición de su DxO ONE para subexponer la imagen. Para escoger el valor, basta con desplazar el cursor según el resultado deseado. Esta función, disponible en los modos AUTO, P (programado), A (prioridad a la apertura) y S (prioridad a la velocidad), permite acentuar los contrastes. Si la imagen es demasiado suave, aumente aún más el contraste con un programa de retoques.
Cuando el contraste de la escena es demasiado fuerte y no ha podido corregirlo durante la captura, siempre podrá recuperar los tonos oscuros o claros durante la posproducción con un programa de retoques de DxO, o aclarar las sombras configurando la intensidad del “Mobile Smart Lighting” DxO en los ajustes de la DxO ONE. (más información en la sección “Ajustes de captura”).
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