Time-lapse Transiciones (diurnas a nocturnas y nocturnas a diurnas)
Requisitos para este tutorial
Para progresar
Configuración
– Urbano o nublado: intervalo de 10 segundos, 2 horas de duración
-Baja luminosidad o cielo despejado: intervalo de 30 segundos, duración > 5 horas
Auto-ramping (variación automática) activado
ISO automático
Configuración manual de enfoque en infinito
Introducción
La transición es probablemente uno de los efectos más complejos y más satisfactorios del universo del time-lapse, ya sea de diurna a nocturna o de nocturna a diurna. Quizás lo que más llame la atención de aquellos que se adentran en este mundo es la capacidad de ver el paso del tiempo y el sorprendente cambio de luces. Condensar la puesta de Sol, la salida de la Luna o el movimiento de las estrellas en tan solo unos segundos es algo extraordinario, aunque se trata de una de las técnicas de time-lapse más difíciles de controlar.
Antes de la sesión
La preparación previa es fundamental, ya que la grabación durará horas, con todos los problemas que esto conlleva. Debemos comprobar que tenemos suficiente batería y espacio en la tarjeta de memoria, así como comida y bebida en caso de permanecer durante la grabación. Además, debemos elegir un día poco o nada nublado, ya que utilizaremos un largo intervalo y el movimiento de las nubes no sería fluido ni suave.
Asimismo, debemos tener en cuenta por dónde saldrán o se pondrán el Sol y la Luna para escoger la mejor ubicación. En este sentido, es fundamental utilizar una aplicación como PhotoPills para preparar la transición adecuadamente en función del movimiento y la dirección de estos cuerpos celestes.
Configuración de la exposición
Al contrario que en la mayoría de las situaciones en las que el modo manual se recomienda encarecidamente, en una transición debemos dejar que la cámara cambie gradualmente la exposición a medida que el Sol sube o baja.
Para esto, la DxO ONE incluye una función llamada “Auto-Ramping” (“variación automática”), la cual modifica progresivamente la velocidad de obturación y el ISO para adaptar la exposición al nivel de luminosidad de cada instante.
Además, debemos seleccionar el ISO automático, ya que durante la noche necesitaremos un ISO mayor que durante el día, con el fin de mantener la velocidad de obturación por debajo del intervalo. No olvide escoger el modo de prioridad de apertura con una gran apertura durante la noche. Seleccione el modo de enfoque manual y configúrelo en infinito.
La DxO ONE puede variar la exposición en décimas de segundo entre tomas, por lo que cuantas más tomas realice, más precisa será la variación, evitando así parpadeos no deseados.
Configuración del intervalo
Para las transiciones, ya sean de diurnas a nocturnas o viceversa, utilizaremos los intervalos más largos, ya que deseamos capturar una escena que durará varias horas.
Teniendo en cuenta que se necesitan 30 fotos para obtener un segundo de vídeo, si tomamos una foto por minuto, obtendremos dos segundos de vídeo por cada hora.
De esta manera, si capturamos una transición durante ocho horas, por ejemplo, obtendremos 16 segundos de vídeo final, con el intervalo indicado de 1 minuto. Por otro lado, si deseamos una transición algo más breve, de unas 4 o 5 horas, podemos seleccionar un intervalo de 30 segundos para lograr el metraje suficiente.
Evaluación del resultado
El momento mágico llega por fin cuando podemos ver el resultado tras horas de grabación. Si ha escogido previamente la opción “vídeo + raw”, la DxO ONE generará un archivo de vídeo al finalizar la secuencia y podrá ver el resultado inmediatamente. En teoría, la transición del vídeo será limpia y fluida, sin saltos de luminosidad ni parpadeos.
Si se ha elegido un día despejado sin nubes y se ha configurado la cámara correctamente (intervalo, exposición, etc.), debería ser así, pero si no, no se desanime. Inténtelo de nuevo y no olvide que dominar una técnica exige mucha práctica.
Enrique Pacheco
Director de fotografía
& especialista en paisaje y time-lapse
enriquepacheco.com